🪞Volver a casa, aunque el camino esté lleno de espejos ajenos
Hay una escena que se repite muchas veces, casi sin darte cuenta.
Entras a una reunión, una comida familiar, una videollamada...
Y sin saber cómo, te vas desdibujando.
Tu tono se ajusta.
Tus palabras se moderan.
Tu presencia se adapta como si fueses un líquido que toma la forma del recipiente.
Y lo haces bien.
Tan bien, que a veces ni tú notas que te has ido.
Pero al terminar el encuentro… sientes un pequeño vacío.
Un cansancio que no tiene nombre.
Una especie de nostalgia sin causa.
Eso que sientes es el eco de tu propia voz pidiendo volver.
‣
🎭 El arte de adaptarte hasta desaparecer
‣
🧬 Cuando tu estructura es mimetizarte
‣
🧠 Lo que sucede dentro de ti
‣
🪄 El primer acto de fidelidad a ti
‣