¿Te has sentido agotado por complacer a los demás?
Complacer o sacrificarte por los demás se debe a tu miedo a que los demás te juzguen, pocas veces se debe a una bondad innata en ti, el sacrificio no es de buenas personas.
¿Te sometes al juicio de los demás? Complacer en exceso puede ser una forma de intentar HUIR o evitar el juicio de los demás.
¿Intentas caer bien a todo el mundo? ¿Haces y dices lo que crees que los demás quieren oír o ver de ti? Cuidado, eres una bomba de relojería.
Cómo la mirada de los demás puede condicionar nuestra vida
Vivimos muchas veces sometidos al qué dirán o al miedo al juicio de los demás.
La estrategia de sacrificarse, complacer o seducir
Si tu cerebro fabrica respuestas dirigidas a complacer al otro pones en juego una especie de seducción para evitar sentirte juzgad@, sacrificando tus propias necesidades en el proceso.
Hacerse necesario o imprescindible
Otra estrategia de huir es hacerse imprescindible, intentando ser tan bueno o buena que terminamos siendo necesarios para nuestro entorno. Sin embargo, si sentimos que no cumplimos con estas expectativas, podemos terminar sintiéndonos culpables y juzgándonos a nosotros mismos o exigiéndonos hasta el agotamiento para “dar la talla”.
¿Cómo salir de estas estrategias?
Si te identificas con estas estrategias, es importante reconocer en qué situaciones te sucede y tomar conciencia. Establece límites saludables, practica el autocuidado, y trabaja en tu autoconfianza.