Hay dolores que no pasan por la mente, pero se quedan atrapados en el cuerpo.
El estómago es uno de los lugares favoritos del cuerpo para esconder aquello que no pudimos expresar, soltar o resolver. Desde fuera parece solo una molestia digestiva. Pero si escuchamos con más atención, descubrimos un mensaje profundo.
EL ESTÓMAGO COMO ESPEJO DE LAS EMOCIONES NO DIGERIDAS
El estómago recibe, descompone, procesa y asimila. Cuando emocionalmente vivimos algo que no podemos "tragar", algo que nos duele, nos indigna o nos rompe por dentro, esa energía no desaparece. Si no se procesa, se queda pendiente… y muchas veces se aloja en la mucosa del estómago, como una herida silenciosa.
🔎 Esto suele ocurrir cuando:
- Nos tragamos palabras por miedo a romper una relación.
- Nos sentimos humillados, ignorados o no respetados.
- Vivimos situaciones donde el cuerpo se tensó y la emoción se bloqueó.
- Tuvimos que callar nuestra rabia, pena o decepción.
- Nos exigimos demasiado y vivimos con una voz crítica constante.
Y el cuerpo, en su inmensa sabiduría, intenta ayudarnos. Pero como no lo estamos escuchando, lo hace a su manera: enviando un síntoma, una señal, una incomodidad que crece.
👉🏻 Si estás leyendo esto porque tienes síntomas en el estómago, quizá tu cuerpo esté diciéndote:
“Ya no puedo seguir tragando todo esto sin que te detengas a mirarlo”.
La buena noticia es que no necesitas tenerlo todo claro para empezar a sanar. Solo necesitas hacer espacio para que lo que llevas dentro empiece a salir, sin juicio, con cariño, con mucha honestidad.
✍🏼 EJERCICIOS TERAPÉUTICOS PARA SOLTAR Y DIGERIR
Vamos a trabajar con lo que llevas dentro. A tu ritmo. Con suavidad.
🧾 Ejercicio 1: Lo que no pude decir
🌬 Ejercicio 2: Respiración para liberar tensión en el estómago
🧡 Tu estómago te muestra tu propio cansancio
Tu estómago no está roto. Está cansado de sostener tanto solo.
Cada vez que te atreves a escribir, respirar, visualizar o simplemente sentir sin huir, estás enviándole un mensaje nuevo:
“Ya no hace falta que te enfermes para que te escuche”.
Estás haciendo espacio para la sanación.